RESEÑA - BEGOTTEN

País: Estados Unidos

Director: E. Elias Merhige

Elenco: Bryan Salzberg, Donna Dempsey, Stephen Charles Barry

Sinopsis: Un mito creacional llevado a la pantalla.

¿Qué puedo decir de Begotten que no se haya dicho ya? Tal vez, solamente mis propias conclusiones.

Es una sorpresa con 72 minutos de duración. Y es una sorpresa de las agradables, obviamente. No es sorprendente, sin embargo, por las razones morbosas. Es el trabajo y el cuidado que le han puesto a la obra lo que la hace importante. La delicadeza con la que pensaron las tomas, los efectos especiales, el vestuario, pero sobre todo el audio. Fue el audio lo que me prendó de este filme. Esos únicos dos sonidos que se repiten una y otra vez, elevan la experiencia. Uno entiende que el tiempo no existe, que no hay nada más que estos dos sonidos de fondo y los personajes. La Madre Tierra, su hijo y las criaturas. Bueno, y el cuerpo de un dios ya muerto. Pero sobre todo, uno mismo con sus pensamientos. 

En lo personal, lo único que puedo criticar de la película es que debido a que es la audiencia quien completa la historia, por momentos uno puede perderse. No porque la narrativa sea confusa o el filme no esté hecho con cuidado sino porque al tener que llenar esos pequeños huecos -creados a propósito-, uno puede soltar el hilo. Luego, claro, se vuelve a recuperar pero creo que es importante mencionarlo. Aunque, admito, no dudo que haya sido algo que sólo a mí me pasó y no una experiencia universal. 

Puedo decir que la película es muy buena y que su verdadera importancia reside en lo excelentemente ejecutada que está. Ahora considero que su valor no está en aquella escena que vemos repetida una y otra vez, que se expone morbosamente para generar asco y tal vez miedo, sino en que logró llevar a la pantalla un mito creacional y hacernos creer en ello. En que, con pocos elementos, nos sumergió en un mundo nuevo, en su desarrollo y en sus personajes. Y estoy en total desacuerdo en que sea catalogada como horror o terror. Porque no lo es. Si no catalogamos un documental sobre el narco en México como horror, ¿por qué a esta película sí? Sí, que en esta obra de Merhige se muestran escenas que son incómodas, pero son necesarias porque no cuenta con diálogos; por lo tanto, sólo visualmente puede hablarnos. ¿Cómo vamos a entender lo aparatoso que puede ser un nacimiento si no nos muestran al bebé saliendo de su madre? No entenderíamos la ansiedad, el miedo, la sorpresa que la película pretende, sin esas escenas que justamente nos generan tales emociones. 

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