Reseña-La diosa del asfalto

 

País: México 

Año: 2019

Dirección: Julián Hernández 

Guion: Inés Morales y Susana Quiróz

Elenco: Ximena Romo; Mabel Cadena; Alejandra Herrera; Samantha Orozco; Axel Arenas; Paulina Goto; Raquel Robles y Jimena Mancilla

Sinopsis: De vuelta al barrio como una cantante de rock, Max, se reencuentra con su pasado. En Santa Fé, donde dejó amistades, promesas y demonios. Basada en Hechos reales, esta historia nos recuerda la crudeza de vivir marginada por ser mujer. Cuando la violencia y el machismo son el pan de cada día.

“¡Biturras filosas del barrio, presentes!”

Todo empieza en donde terminó. Un terreno olvidado por Dios y un grupo de adolescentes. Una pandilla fragmentada por una maldición que las perseguirá por siempre. Así las Castradoras de Santa Fé, nos adentran en su mundo. 

Max, Ramira, La Carcacha, Sonia y Juama buscan encontrarse en un mundo perdido donde no son nadie. Por lo que buscan ganarse su lugar a costa de lo que sea, pues no tienen miedo de perder nada. Para ellas, la lealtad, lo es todo, tanto que podría costarles su libertad o su amistad. 

Si bien no es una película feminista, retrata toda consecuencia sobre ser joven, mujer y sobrevivir. Una lección sobre aquello que no queremos ver y sabemos que existe. Machismo, pobreza, violencia y un tumulto de vicios sociales, los cuales no se quedan en la película, sino son la lucha diaria de las mujeres mexicanas. 

“Esos cabrones huelen nuestra debilidad, por eso se pasan de gandallas.”

El enojo retratado es puro de cada una de las protagonistas de la película. Sin casa y mucho menos un hogar, estas 5 chicas, luchan contra todo pronóstico. Las oportunidades son nulas pero los augurios son eternos. Parece que día con día, su situación empeora al grado de perderse en drogas, peleas callejeras y cuestionar su identidad. 

A través de paneos y contrapicados el director Julián Hernández, revive  el barrio de Santa Fé. Crudo y sucio, pero sobre todo olvidado. Aunque no es la primera vez que vemos estos rumbos, La diosa del asfalto, está basada en la vida de quienes salieron de ahí. Una de sus guionistas, Susana Quiroz, plasmó todos sus recuerdos y vivencias para la realización de este filme. 

Después de mucho trabajo e insistencia Inés Morales  y Susana Quiroz, le dieron su vida a Hernández. Escrita en el guion de su propia realidad. La cual pone la piel de gallina y te arrebata el alma. No obstante, vale la pena contar la historia detrás de cámaras sobre esta narración. 

“El compartir mi experiencia con Inés Morales, me ayudó a cicatrizar heridas del pasado y a recordar a mis valedoras de coraza, morrillas de 14 y 16 años que luchamos por ser visibles y ganarnos un respeto dentro del barrio; así fue como formamos nuestra propia banda de chavas. Yo pertenecí a La Lágrimas Rockers”. Aunque cómo nos costó nuestra rebeldía, ya que tuvimos que sobrevivir en un mundo de violencia, burlas y humillaciones defendiendo un lugar frente a los chavos, para dejar de ser las batas del rol. Pero tenía que ser así para levantar ámpula y aguantar candela achicalando los peligros y discutiéndonos en los chances, aferrándonos a nuestra rebeldía para seguir sobreviviendo en el rol de la vida.”

Cuenta Susana Quiroz en una entrevista donde comparte el porqué es tan importante para ella esta película. No es para menos, pues esta situación sigue siendo realidad en las periferias de la Ciudad de México. Probablemente las zonas más ignoradas de la metrópoli, las cuales no vemos sino es a través de la pantalla grande. 

Las Castradoras de Santa Fé, fueron una pandilla de adolescentes quienes a mediados de los noventa, aterrorizaron a abusadores y violadores. Los periódicos encabezaban las noticias de ellas con miedo, pues se les consideraba peligrosas. Incluso las llegaron a comparar con Los Panchitos de los años 80s. 

En resumen, la importancia de esta cinta en tiempos de revolución femenina , es un llamado de atención para todas aquellas quienes están en la contienda. Una verdad incómoda para quienes sus privilegios les nublan la humanidad . Así cómo un recordatorio para todos de escuchar a los más jóvenes y darles su lugar en este mundo, además de respeto y empatía. 

“Lo chido es apoyarnos todas y unirnos en el refuego.”

Disponible en Netflix y la Cineteca Nacional hasta el 13 de septiembre del 2021

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